viernes, 4 de marzo de 2011

AJUAR, Pablo García Casado

AJUAR

Vendió su casa para pagar las deudas, sólo se quedó lo necesario. Estamos bien, dice, un piso más pequeño, más fácil para limpiar. El resto está en una nave que tiene su hermano en el polígono. Vitrina Luis XV, cómoda de caoba, vajilla, protegidas del frío y la humedad por un plástico transparente. Todos los domingos, muy temprano, toma el autobús hasta el polígono con una bolsa de trapos y productos de limpieza.


PABLO GARCÍA CASADO, Dinero, DVD, Barcelona, 2007, página 33.