sábado, 19 de marzo de 2011

QUÉ VIDA, Isla Correyero

QUÉ VIDA

Tan fríamente mi amor aquella noche
me dijiste inmóvil que la pasión se te pasó
que parecía que no te estuvieses
refiriendo a ti y a mí.
Unas horas más tarde (los verdugos inventan sus motivaciones)
me hiciste una humillante descripción
del cuerpo y mis dificultades
físicas y psíquicas
instándome a enamorarme de otro
que cambiase mi metabolismo
que qué espectáculo de desnudez moral
casi furiosa
por fin vi en ti
y algo o alguien puso en tu boca vocablos
de vulgar medicina
para que de esa vez te brotara
tanta sabiduría impúdica
de médico vidente naturópata antimalaspresencias
curandero ocultista.
Y exorcista también —cómo no—
para echar de mí o sobre mí
esa gran polución de puta y caridad para las putas
sepulcros del placer
sobre un burdel de nardos: mi cama japonesa aún oliendo a ti
a tu glorioso montón de austeridad.
Y expulsaste de mí todos los dulces demonios
del amor excesivo que te tuve: la alternancia
de salud y pasión
infierno y paraíso.
la renuncia y la vida.

Si es que esto sin ti
es la vida.

ISLA CORREYERO, Amor tirano, DVD, Barcelona, 2003, pp. 46-47.