viernes, 7 de junio de 2013

VENIMOS DEL POLVO, Pere Calders


VENIMOS DEL POLVO
        
   Excavaron enfrente de su casa. No querían decirle si hacían una piscina o la base de una glorieta. «Se trata de una sorpresa», respondían a cada una de sus preguntas. Y lo fue, porque cuando completaron las medidas le dieron aquello que se llama cristiana sepultura.

PERE CALDERS, Ruleta rusa y otros cuentos, Anagrama, Barcelona, 1984, página 291.