jueves, 30 de abril de 2015

[VARIOS EMIGRANTES...], Belén Gopegui


   Varios emigrantes a quienes no explican que para entrar en la cámara de pan congelado a menos diez grados hay que ponerse un chaquetón especial, pues el contraste con los cuarenta grados del horno es muy fuerte, acaban con una neumonía doble. El médico de la seguridad social, narrador de la historia, propone que esas neumonías sean consideradas enfermedad profesional. Rechazan su propuesta: con mano de obra más cualificada, le dicen, eso no ocurriría.



BELÉN GOPEGUI, El padre de Blancanieves, Anagrama, Barcelona, 2007, pp. 298-299.
&
Edourd Sacaillan

miércoles, 29 de abril de 2015

[POSA EL JILGUERO...], Manuel Villena

Posa el jilguero.
Con un leve aleteo
se desdibuja.

Manuel Villena
&
Carel Fabritius

martes, 28 de abril de 2015

[TODOS SOMOS POLIZONES...], Charles Simic

   Todos somos polizones en una nave de locos.

CHARLES SIMIC, El monstruo ama su laberinto, Vaso Roto, Madrid, 2015, p. 47.
&
Carmen Calvo

lunes, 27 de abril de 2015

[NO TIENE MIEDO...], Manuel Villena

No tiene miedo
la niña ciega. Ríe
el acantilado.
 
Manuel Villena

domingo, 26 de abril de 2015

TRIÁNGULO AMOROSO, Ricardo Alberto Bugarín

TRIÁNGULO AMOROSO

   Íbamos de lado en lado. Nos abrazábamos en los ángulos. Nos acurrucábamos en los vértices. Éramos un jolgorio. Al final, nos fuimos por la hipotenusa.

RICARDO ALBERTO BUGARÍN, Bonsai en compota, Macedonia, Morón, 2014, p. 119.
&
Robert Doisneau

sábado, 25 de abril de 2015

[ME ACUERDO...], Elías Moro

   Me acuerdo de cuando supe que todos morimos alguna vez.

ELÍAS MORO, Me acuerdo, De la luna libros, Mérida, 1999, p. 59.
&
Sophie Ducruet

viernes, 24 de abril de 2015

[ODIO Y MALDAD...], Manuel Villena

Odio y maldad
merodean por mi casa.
Cruel remolino.


Manuel Villena
&
Jacques Poirier

jueves, 23 de abril de 2015

FELICES LOS NORMALES, Roberto Fernández Retamar

FELICES LOS NORMALES

Felices los normales, esos seres extraños,
Los que no tuvieron una madre loca, un padre borracho, un hijo delincuente,
Una casa en ninguna parte, una enfermedad desconocida,
Los que no han sido calcinados por un amor devorante,
Los que vivieron los diecisiete rostros de la sonrisa y un poco más,
Los llenos de zapatos, los arcángeles con sombreros,
Los satisfechos, los gordos, los lindos,
Los rintintín y sus secuaces, los que cómo no, por aquí,
Los que ganan, los que son queridos hasta la empuñadura,
Los flautistas acompañados por ratones,
Los vendedores y sus compradores,
Los caballeros ligeramente sobrehumanos,
Los hombres vestidos de truenos y las mujeres de relámpagos,
Los delicados, los sensatos, los finos,
Los amables, los dulces, los comestibles y los bebestibles.
Felices las aves, el estiércol, las piedras.

Pero que den paso a los que hacen los mundos y los sueños,
Las ilusiones, las sinfonías, las palabras que nos desbaratan
Y nos construyen, los más locos que sus madres, los más borrachos
Que sus padres y más delincuentes que sus hijos
Y más devorados por amores calcinantes.
Que les dejen su sitio en el infierno, y basta.

Roberto Fernández Retamar
&
Kerstin Kuntze

miércoles, 22 de abril de 2015

SIRENA, Esteban Dublín

SIRENA

   A Javier Perucho
  
   Soy marino. Bueno, marino retirado para ser más exactos. La última vez que zarpé, naufragué. No digo que me hayan olvidado, porque más de una vez han llegado a rescatarme, pero yo mismo he preferido quedarme en esta isla. La razón no puede ser otra: me enamoré de una sirena. La primera vez que la vi, temí que me embrujara con su canto, pero al conocerla, comprendí que la advertencia de Circe no era más que un mito. Ambos renunciamos a nuestros mundos: yo, a la mujer que me esperaba en casa y ella, a los cientos de tritones que la pretendían. Cualquiera puede comprender que un mortal como yo se pierda por la belleza de una sirena, pero lo que nunca me cupo en la cabeza fue que ella me correspondiera. Un día, incrédulo ante el amor que me profesaba, le pregunté qué era lo que más le gustaba de mí. “Tus piernas, guapo”, respondió sin dudar.

Esteban Dublín



JAVIER PERUCHO, La música de las sirenas, Toluca, Consejo Editorial de la Administración Pública Estatal, 2013.

martes, 21 de abril de 2015

[NADIE TERMINA...], Belén Gopegui

   Nadie termina en sí mismo.

BELÉN GOPEGUI, El padre de Blancanieves, Anagrama, Barcelona, 2007, p.304.
&
Pere Borrel del Caso

lunes, 20 de abril de 2015

[EN UN CAMPO LLENO DE MINAS...], Abbas Kiarostami

 
En un campo lleno de minas
cien árboles
llenos de florecillas

ABBAS KIAROSTAMI, El viento y la hoja, Salto de Página, Madrid, 2015, p. 28.
&
Abbas Kiarosrami

domingo, 19 de abril de 2015

[CRUJE EL PELDAÑO...], Manuel Villena

Cruje el peldaño
con el peso del tiempo.
Gruñe el pasado.

Manuel Villena

sábado, 18 de abril de 2015

[EL OJO ANTENTO...], Charles Simic

  
   El ojo atento empieza a oír.

CHARLES SIMIC, El monstruo ama su laberinto, Vaso Roto, Madrid, 2015, 129.
&
Zoltan Glass


viernes, 17 de abril de 2015

MARILYN, Eduardo Galeano

MARILYN

   Como Rita, esta muchacha ha sido corregida. Tenía párpados gordos y papada, nariz de punta redonda y demasiada dentadura: Hollywood le cortó grasa, le suprimió cartílagos, le limó los dientes y convirtió su pelo castaño y bobo en un oleaje de oro fulgurante. Después los técnicos la bautizaron Marilyn Monroe y le inventaron una patética historia de infancia para contar a los periodistas.
   La nueva Venus fabricada en Hollywood ya no necesita meterse en cama ajena en busca de contratos para papeles de segunda en películas de tercera. Ya no vive de salchichas y café, ni pasa frío en invierno. Ahora es una estrella, o sea: una personita enmascarada que quisiera recordar, pero no puede, cierto momento en que simplemente quiso ser salvada de la soledad.

EDUARDO GALEANO, Mujeres, Siglo XXI, Madrid, 2015.
&
John Huston

jueves, 16 de abril de 2015

[UN OLOR RANCIO...], Manuel Villena

Un olor rancio
arrastra la pobreza.
Suelas gastadas.

Manuel Villena
&
Leon Levinstein

miércoles, 15 de abril de 2015

[LA MUERTE ES UNA FORMALIDAD...], Paul Claudel

   La muerte es una formalidad muy desagradable, pero todos los candidatos son admitidos.

Paul Claudel  
&
Thierry Despon

martes, 14 de abril de 2015

[BAJO LA CAMA...], Manuel Villena

Bajo la cama
yace la fe perdida.
Polvo y pelusas.


Bajo la cama
yace un deseo añejo.
Polen estéril.


Manuel Villena
&
Ronald Puhle

lunes, 13 de abril de 2015

[ME ACUERDO...], Daniel Casado

   Me acuerdo de la inexplicable tristeza de los lunes.

DANIEL CASADO, Me acuerdo, De la luna libros, Mérida, 1999, p. 59.
&
Kerstin Kuntze

domingo, 12 de abril de 2015

[ÉL ESCRIBE...], Jordi Doce

    Él escribe para ir librándose del peso de los recuerdos.
   Pero sucede que los cuenta tan bien, con palabras tan justas, que ya no consigue quitárselos de encima.


JORDI DOCE, Perros en la playa, La Oficina, Madrid, 2011, p. 132
&
Kerstin Kuntze

sábado, 11 de abril de 2015

[DE VUELTA A CASA...], Manuel Villena

De vuelta a casa
el rencor también calza
sus zapatillas.

Manuel Villena
&
Tachi


[TEJEN LAS ALGAS...], Manuel Villena

Tejen las algas
un torpe sudario añil.
Ofelia ha muerto.


Manuel Villena
&
Cirenaica Moreira

jueves, 9 de abril de 2015

SI RECUERDO QUIÉN FUI..., FERNANDO PESSOA

SI RECUERDO QUIÉN FUI...

Si recuerdo quién fui, a otro veo,
y el pasado es un presente en el recuerdo.
Quien fui es alguien a quien amo,
aunque sea tan solo en ese sueño.
La nostalgia que la mente aflige
no es mía ni del pasado conocido,
sino de quien habito
tras de los ojos ciegos.
Nada, salvo el instante, me conoce.
Mi mismo recuerdo no es nada, y siento
que quien soy y quien fui
son sueños diferentes.

Ricardo Reis

FERNANDO PESSOA, Un disfraz equivocado, Nórdica, Madrid, 2015.

Traducción: Martín López-Vega
&
Adolfo Serra

[HUECA ES LA VIDA...], Manuel Villena

Hueca es la vida:
un paréntesis breve.
Vacío y espanto.

Manuel Villena
&
Elliott Erwitt

[EL ODIO AGITA...], Manuel Villena


El odio agita
en mí el recuerdo, como
ropa tendida.


Manuel Villena
& Mathieu Goussin & Hortense Le Calvez

miércoles, 8 de abril de 2015

[NO SIEMPRE FUE PASADO...], José Luis Morante


   No siempre fue pasado e invisible.

&
Stephen Boyling

martes, 7 de abril de 2015

[LAS PALABRAS DUERMEN...], Belén Gopegui


   Las palabras duermen hasta que alguien las despierta, les da sentido, las necesita.

BELÉN GOPEGUI, El padre de Blancanieves, Anagrama, Barcelona, 2007, p. 55.
&
Anouk Vercouter

lunes, 6 de abril de 2015

COMO DECÍAN EN EL RENACIMIENTO, Sylvia Solé


COMO DECÍAN EN EL RENACIMIENTO

   Jesús dijo: «quisiera hacerme nadie, como decían en el Renacimiento» Casi seis años después, yo qui­siera hacerme nadie. Miro el cuadro de Zóbel que me engancha, el cuadro que mi padre miraba duran­te horas y horas y horas y horas (cuántas veces puede decirse «y horas» sin cansarse). Lo miro tanto que se empieza a descarriar mi cabeza y veo puntos blancos y comienzo a pensar en paisajes bucólicos en plan Turner y Constable. Suena Van Morrison. Y luego Billie.Y luego Chet Baker,y empiezo a pensar si realmente sería pastelero o sólo acariciaba el jazz. De repente me acuerdo de tender la ropa. O de ducharme. O de que tengo que entregar un tra­bajo sobre Millás de los cojones (el trabajo y él, y el que me lo mandó). O de que tengo que ir a trabajar, O de que mi cama está vacía.


&

domingo, 5 de abril de 2015

[EN 1939, ADOLF HITLER...] 02, Diogo Mainardi

100

   En la primera fase del programa de eutanasia de Adolf Hitler, murieron cinco mil recién nacidos discapacitados.
   El historiador Robert Jay Lifton publicó el testimonio de uno de los médicos responsables de dichas muertes, identificado sencillamente como doktor F:
   «Aquellos a los que seleccionaban para morir recibían altas dosis de Luminal. Eran niños espásticos, incapaces de hablar o caminar. Quien los viera desde fuera, supondría que estaban durmiendo. En realidad, se estaban muriendo.»

102

   El programa de eutanasia involuntaria de Adolf Hitler, denominado T4, no tardó en ampliarse. En su segunda fase abarcó no sólo a los recién nacidos discapacitados, sino también a los adultos discapacitados, los enfermos mentales, los epilépticos y los alcohólicos.
   Seis hospitales se convirtieron en centros de exterminio donde los médicos eran los encargados de eliminar a los pacientes inyectándoles una mezcla de morfina, escopolamina, curare y cianuro.

105

   En los primeros meses de 1940, en el hospital de Brandeburgo, Karl Brandt asistió a un experimento que cambiaría el rumbo del programa T4.
   Veinte pacientes, encerrados en un recinto similar a unas duchas públicas, fueron gaseados con monóxido de carbono y murieron asfixiados.
   Acto seguido, las SS incineraron los cadáveres.

106

   Cuando Karl Brandt informó a Adolf Hitler sobre el resultado del experimento de Brandeburgo, éste determinó que todos los «enemigos biológicos» del Tercer Reich se eliminaran del mismo modo: asfixiándolos e incinerándolos.

107

   Enemigos biológicos. Biologische Feinde.
  
   Sólo la «higiene racial» podría eliminar a los «enemigos biológicos» que contaminaban el Tercer Reich.
  
   Higiene racial. Rasscnhygiene.

108

   En el segundo trimestre de 1940, en nombre de la higiene racial, el Ministerio del Interior de Adolf Hitler ordenó contabilizar a todos los judíos incluidos en el programa T4.
   En junio de ese año, murió asfixiado e incinerado en el hospital de Brandeburgo un primer grupo de doscientos judíos procedente de una clínica psiquiátrica de Berlín.

109

   El exterminio de Gerhard Kretschmar —un recién nacido discapacitado y repudiado por su padre— había dado pie al exterminio de todo un pueblo: el Holocausto.

110

   En menos de dos años, el programa T4 mató a más de cien mil personas.
   Adolf Hitler lo suspendió el 24 de agosto de 1941.
   Dos meses más tarde, en las inmediaciones de Chelmno, se inauguró el primer gran campo de exterminio controlado por las SS, donde se procedió a gasear e incinerar industrialmente a todos los enemigos biológicos e ideológicos de Alemania, es decir, discapacitados y judíos.
   En los meses siguientes, se inauguraron los campos de exterminio de Belzec, Sobibor, Majdanek, Treblinka y Auschwitz.

111

   El supervisor del programa T4, Franz Stangl, responsable de la muerte de treinta mil discapacitados en el centro de eutanasia de Schloss Hartheim, se convirtió en el primer comandante del campo de exterminio de Sobibor.
   Entre mayo y agosto de 1942, asesinó a cien mil judíos.

   Pranz Stangl ascendió a comandante del campo de exterminio de Treblinka II.
   Entre agosto de 1942 y agosto de 1943, asesinó a ochocientos mil judíos más.


112

   Tras la caída del Tercer Reich, Franz Stangl se refugió en Brasil.
   Perseguido por Simon Wiesenthal, fue detenido el 28 de febrero de 1967 y extraditado a Alemania.
   Declarado culpable de la muerte de más de novecientas mil personas —entre los afectados de parálisis cerebral de la Aktion T4 y los judíos de la Aktion Reinhard—, murió en una cárcel de Dusseldorf.


113

   Al igual que Franz Stangl, Josef Mengele buscó refugio en Brasil.
   Como médico de las SS, era el encargado de examinar y seleccionar a los prisioneros del campo de exterminio de Auschwitz.
   A los más válidos —que podían emplearse como mano de obra esclava— les indicaba que se colocaran a su derecha. Los menos válidos —que podían ser gaseados e incinerados de inmediato— debían colocarse a su izquierda.

116

   En Auschwitz, Josef Mengele llevó a cabo experimentos médicos que provocaron graves secuelas o la muerte a miles de prisioneros.
   Formado en el Instituto de Higiene Racial de Frankfurt, sentía un interés especial por los portadores de anomalías hereditarias como el enanismo, el hermafroditismo y el síndrome de Down. Según Mengele, el propio judaísmo era una anomalía hereditaria. En su estado natural, todos los judíos eran «monstruos». Y todos los «monstruos» eran judíos.
   

DIOGO MAINARDI, La caída. Memorias de un padre en 424 pasos, Anagrama, Barcelona, 2015.

sábado, 4 de abril de 2015

[LA FÍSICA NUCLEAR...], Carlos Edmundo de Ory

   La física nuclear no me sirve para comprender por qué lloro por amor.

CARLOS EDMUNDO DE ORY, Los aerolitos, Calambur, Madrid, 2011, p. 77.
&
Stephen Boyling

viernes, 3 de abril de 2015

[EN 1939, ADOLF HITLER...] 01, Diogo Mainardi

91

   En 1939, Adolf Hitler recibió una carta de Richard Kretschmar, un jornalero de Leipzig.
   En ella, Richard Kretschmar imploraba a Adolf Hitler que lo ayudara a terminar con la vida de alguien al que calificaba de «monstruo».
   El «monstruo» de Richard Kretschmar era su propio hijo, Gerhard Kretschmar.
   Gerhard Kretschmar había nacido ciego, manco y cojo. Según su padre, también había nacido «imbécil».

92

  Adolf Hitler ordenó a su médico particular, Karl Brandt, que fuese a la Universidad de Leipzig y examinara personalmente a Gerhard Kretschmar.
  En los juicios de Núremberg, el propio Karl Brandt se encargó de relatarlo:
  «Sí los hechos que el hombre refería eran ciertos, debía informar a los médicos de que podían practicar una eutanasia en nombre de Hitler.»

93

   Tras examinar a Gerhard Kretschmar, Karl Brandr autorizó su muerte.
   El 25 de julio de 1939, con cinco meses de edad, Gerhsard Kretschmar —ciego, manco, cojo e imbécil— fue ejecutado con una elevada dosis de Luminal.

94

   En un testimonio recogido treinta años después, el padre de Gerhard Kretschmar, Richard Kretschmar, recordó la «eutanasia» de su «monstruo» en los siguientes términos:
   «Karl Brandt me explicó que el Führer estaba muy, pero que muy interesado en el caso de mi hijo. Quería solucionar el problema de las personas desprovistas de futuro, aquellas cuya vida carecía de valor. Por eso consintió que nuestro hijo tuviera una muerte piadosa. En el futuro podríamos tener otros hijos, perfectos y sanos, de los que el Reich se sentiría orgulloso.»
   ¿El Orgullo del Estado?


95

   Cuatro semanas después del asesinato de Gerhard Krerschmar, el Ministerio del Interior de Adolf Hitler determinó que todo recién nacido discapacitado fuese denunciado a las autoridades del régimen.
   El reglamento del Ministerio del Interior mencionaba, en particular, a los afectados de «mongolismo, microcefalia, hidrocefalia, deformidad en las extremidades o la columna vertebral y parálisis, incluida la espasticidad».

96

   El 1 de septiembre de 1939, estalló la Segunda Guerra Mundial.
   Ese mismo día, Adolf Hitler firmó un memorándum secreto en el que se detallaba su programa de eutanasia.
   El memorándum otorgaba a los médicos la facultad de «decidir si quienes padecían, según el mejor de los juicios, una enfermedad incurable podrían beneficiarse, tras minuciosos exámenes diagnósticos, de una muerte piadosa».


97

   Muerte piadosa. Gnadentod.
   Eutanasia. Euthanasie.

   Éstos fueron algunos de los términos empleados por el nazismo para legitimar el exterminio en masa de los recién nacidos discapacitados.

   Una vida sin valor. Unwertes Leben.
   Una vida indigna de ser vivida. Lebensunwerten Leben.

   El programa de «eutanasia» de Adolf Hitler aseguraba una «muerte piadosa» a todos aquellos que tenían una «vida sin valor» y una «vida indigna de ser vivida».


DIOGO MAINARDI, La caída. Memorias de un padre en 424 pasos, Anagrama, Barcelona, 2015.

jueves, 2 de abril de 2015

[LUNA INFINITA...], Eduardo Moga

Luna infinita
sobre la finitud
de la estación.

EDUARDO MOGA, Los haikus del tren, El Gaviero, Almeria, 2007, p. 29.

miércoles, 1 de abril de 2015

CANCIÓN DE CUNA PARA MI PADRE, Julio Llamazares

CANCIÓN DE CUNA PARA MI PADRE

Sé  que, una noche amoratada, te creció un fusil entre las manos.

Fue como una primavera de fusiles nacida a borbotones entre un brillo nervioso de cigarros. ¿Recuerdas?

Y tú, con los zapatos sucios de miedo y de tristeza, te marchaste a pisar aquella España llena de sangre y de inmisericordia.

JULIO LLAMAZARES, Versos y ortigas. (Poesía 1973-2008), Hiperión, Madrid, 2009, p. 20.

[CADA LATIDO...], Manuel Villena

Cada latido
recuerda la derrota.
La sed se apaga.
 
Manuel Villena
&
Claudio Parmiggiani