martes, 7 de junio de 2022

MI ABUELA Y HOLOFERNES, Abraham Guerrero Tenorio


MI ABUELA Y HOLOFERNES 

 

Cuando hablo de violencia, pienso 

en Judit y Holofernes, de Caravaggio: 

el tenebrismo al fondo, 

la luz entera nace del pecho de Judit, 

la vieja con la piel rugosa, tensa la sien, 

aguarda la cabeza de Holofernes, 

la cabeza que agarra la mano de Judit, 

la cabeza que grita. 

 

Aunque cuando hablo de violencia 

también pienso en mi abuela, 

su respingo desconfiado 

cuando una silla arrastra las uñas por el suelo, 

porque piensa en Alfonso, su marido 

que fue la silla y no el respingo. 

Mi abuela, que aún coge 

el rosario que descansa en su pecho 

por si algún Dios piadoso 

pudiera mitigar los golpes recibidos. 

 

Pero ni Caravaggio ni los rezos 

han sabido ofrecerle la rabia de Judit 

o una vieja de piel rugosa 

que aguarde la cabeza de Alfonso, su marido, 

la cabeza que ahora 

junto a ella respira 

por una mascarilla de oxígeno. 

 

ABRAHAM GUERRERO TENORIO, Toda la violencia, Rialp, Madrid, 2021, pp. 15-16.

&

Caravaggio