viernes, 28 de abril de 2017

[NO PONÍA PALABRAS AL DOLOR...], Verónica Aranda


No ponía palabras al dolor.
Vivía en la irrealidad, en los jardines
donde crecían árboles de júpiter.
Era bajo las parras
pura escisión, letargo de los nombres,
brecha en la inconsistencia del panal.

Cantaba a media voz
sin asomarme al cráter.
Vislumbraba el sulfuro y ele mineral ardiente.
Aún no habías llegado y la locura
era papiroflexia,
un barco de papel que caía despacio
a una jofaina llena de agua helada.

VERÓNICA ARANDA, Épica de raíles, Devenir, Madrid, 2016, p. 11.
&
Heinz Hajek-Halke