Solo disponemos de una vida, y la escribimos viviéndola. Los tachones son nuestras heridas, pero en realidad nada se borra. Probablemente al morir nos llevemos con nosotros el manuscrito, con sus obscenidades o esplendores, sus faltas de ortografía y su caligrafía imprevisible. Si está muy bien escrito: ¡hosanna!
Christian Bobin
&
Greta Buysse
1 comments:
Y hay que aprovecharla claro!
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