jueves, 31 de octubre de 2013

PAPÁ SE DESPIERTA CANSADO EN LA OSCURIDAD, Sandra Cisneros



PAPÁ SE DESPIERTA CANSADO EN LA OSCURIDAD

   Se murió tu abuelito, dice Papá una mañana temprano en mi cuarto. Está muerto, y como si en ese momento él acabara de escuchar la noticia, mi valiente Papá se apachurra como abrigo, y llora, y no sé qué hacer.
   Yo sé que tendrá que irse, que tomará un avión a México, allá estarán todos los tíos y tías y se tomarán una foto en blanco y negro frente a la tumba con flores en forma de lanzas en un florero blanco porque así despiden a los muertos en ese país.
   Como soy la mayor, Papá me ha avisado primero y ahora me toca dar la noticia a los demás. Tengo que decirles por qué no podemos jugar. Les tendré que pedir que hoy se estén quietos.
   Papá, sus gruesas manos y sus gruesos zapatos, que se despierta cansado en la oscuridad, que se peina el pelo con agua, bebe su café y antes de que despertemos ya se ha ido, hoy está sentado en mi cama.
   Y yo pienso qué haría si mi Papá muriera. Rodeo a mi padre con mis brazos, y lo abrazo, lo abrazo, lo abrazo.


SANDRA CISNEROS, La casa de Mango Street, Seix Barral, Barcelona, 2004.
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Makoto Saito