Antes de estrellarse contra el suelo, la miró con asombro. Saltaremos juntos ―le había asegurado la bella bellísima―. Una. Dos. Y tres. Y él se precipitó. Y la bella bellísima le soltó la mano. Y desde lo alto, le juró que le amaría hasta la muerte.
Dulce Chacón
3 comments:
La cuidad parece mi amiga,
hoy es mi día y nadie me lo va a arruinar,
las chicas de la esquina rien con picardía,
yo sé que es lo que quieren y se lo voy a dar.
Yo digo salta,
salta conmigo,
digo salta,
salta conmigo,
salta,
salta conmigo...
T Qui la
Perverso relatiño e perverso tamén o mantedor do blog pola inclusión do mesmo nesa precisa data.
En todo caso, o amor é sempre desequilibrio. Agora ben, polo que eu sei, normalmente acábase caendo dende o alto dunha enorme hipoteca que en nada se parece á idealizada torre parisina elexida para ilustrar a desfeita.
Quédame, ao final da lectura, a dúbida de se o amaría "ata a morte... DEL" (¡escasos quince segundos! que volatil veu sendo o seu amor) ou "a morte... DELA" (daquela, polo visto, pode que lle puidese gardar durante moito tempo un recordo "emocionado")
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