lunes, 24 de febrero de 2014

EN EL HOSPITAL, Yevgeni Yevtushenko


EN EL HOSPITAL

1

No me he muerto, no completamente pero casi.
Siento que no sufro más
y mi doctor lee en mis ojos
algo como un miedo muy lejano.
 

Cómo puedo estirar mi vida al menos veinte años
darme el lujo de ser un inocente lleno de pecados...
Pero de mi ojos sobresale una tranquila alienación.

2

Sobrevivo, sobrevivo
pero no vivo.
Vuelvo a revivir, revivir.
Pero, ¿y si muero?
 

¿Soy mi propio traidor, mi propio rival?
Estoy exhausto de esta lucha sin fin
entre dos mundos: el “sobrevivir”
y la palabra que no tiene frontera, “la vida”.

3

Me gusta un río enigmático,
el que corre en dos direcciones. 

Trato de hablar con Dios para discutir.
Tengo miedo si Dios mismo es un creyente, 

que no esté ofendido, 
y se sienta aburrido de nosotros.


YEVGENY YEVTUSHENKO, Manzanas robadas. Antología, Visor, Madrid, 2011, pp. 110-111. 
&
Carol Rama