Un día sofocante, la casa de un perro y el perro encadenado.
Unos pasos más allá un platito lleno de agua.
Pero la cadena es demasiado corta y el perro no alcanza.
Añadamos a la imagen un detalle más:
nuestras mucho más largas y menos visibles cadenas
gracias a las cuales podemos pasar de largo tranquilamente.
WISLAWA SZYMBORSKA, Hasta aquí, Bartleby, Madrid, 2015, p. 27.
&
Juss Piho
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