sábado, 25 de junio de 2011

EXAMEN: RESUMA EL CUENTO DE MONTERROSO, Manuel Espada



EXAMEN: RESUMA EL CUENTO DE MONTERROSO

El protagonista de esta historia es un ser en tercera persona somnoliento y anónimo, ya que el narrador (de carácter omnisciente) no menciona su nombre en ningún momento y acaba de salir de un período de fase REM más o menos largo (no se especifica, puede tratarse de siglos si contemplamos la obra como un relato de corte fantástico o una mera cabezada si es de carácter realista), suponemos que de naturaleza humana para que el contraste temporal y el extrañamiento en el lector sea efectivo y cause sorpresa, estupor, asombro, pasmo, desconcierto y confusión ya que si el protagonista es de naturaleza animal (y más aún si es contemporáneo como por ejemplo un pteranodón) no provocaría el mismo efecto, ya que la convivencia imposible entre el ser humano y el animal terrestre más grande que ha existido (con cabeza pequeña, cuello largo, cola robusta y larga, y extremidades posteriores más largas que las anteriores, y otros con las cuatro extremidades casi iguales, como el diplodoco) produce inquietud y turbación por lo anacrónico y extemporáneo de la imposible coincidencia, porque el hombre apareció en el planeta durante la era Cuaternaria y convivió con animales prehistóricos ya extintos como el mamut, pero el gran reptil que aparece en el texto habitó la Tierra en el período Jurásico, con lo que hay una diferencia de ciento cuarenta y cinco millones de años (cuando los continentes de Pangea comenzaron a separarse en diferentes bloques) entre la extinción del segundo y la creación del primero con barro o quizá con la costilla de Adán, porque, dado el machismo imperante en la Literatura, nadie ha contemplado jamás que la que despertó en el archiconocido y versionado (hasta la saciedad) microrrelato del autor guatemalteco (y sin embargo nacido en Tegucigalpa, capital de Honduras) y vio al dinosaurio fuese una mujer.