miércoles, 20 de mayo de 2015

[HAY UNA HIERBA...], Antonio Gamoneda

Hay una hierba cuyo nombre no se sabe; así ha sido mi vida.

Vuelvo a casa atravesando el invierno: olvido y luz sobre las ro­pas húmedas. Los espejos están vacíos y en los platos ciega la soledad.

Ah la pureza de los cuchillos abandonados.


ANTONIO GAMONEDA, Libro del frío, Siruela, Madrid, 2009.
&
Hengki Koentjoro