ARS LECTORA
Anoto, subrayo y pongo asteriscos porque mientras leo hablo con el libro. Él a veces me contesta, a veces no. En ocasiones sólo habla él, otras sólo hablo yo.
Cuando regreso a un libro que ya había marcado, es como si escuchara una conversación ajena, cuyos detalles y antecedentes desconozco aunque esté familiarizada con los interlocutores. Y después de un esfuerzo inútil, concluyo que esa conversación es estúpida.
Cuando regreso a un libro que ya había marcado, es como si escuchara una conversación ajena, cuyos detalles y antecedentes desconozco aunque esté familiarizada con los interlocutores. Y después de un esfuerzo inútil, concluyo que esa conversación es estúpida.
ADRIANA AZUCENA RODRÍGUEZ, Postales (Mini-hiper-ficciones), México, Fósforo-Inba, 2013, p. 60.
1 comments:
Qué espléndido relato-ensayo, que hace recordar al Reyes de buen humor y ánimo chispeante.
La alusión a Quevedo conduce a un monólogo divertido que sucede frente a la "conversación" que a veces pomposamente suele sacar a pasear la gente.
Celebro tu habilidad, que admiro y de la que me encantaría leer más.
Muchos saludos.
Gabriel Ramos
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