De pronto un día te ves deshilachada,
raída,
y te da por pensar en cosas tristes
como la soltería de una manzana
en el frutero,
un guantelete de cruzado en la nieve
o las bolsas que se ponen en el alféizar
para ahuyentar a las palomas.
El tiempo ronca y no te deja dormir.
Tocas el mundo y es una raspa de pescado.
ALMUDENA GUZMÁN, Zonas comunes, Visor, Madrid, 2011, página 81.
ILUSTRACIÓN: Carmen Valdés
0 comments:
Publicar un comentario